¡ Hola a todos! Ya hemos comenzado el trabajo, los colegios..todo vuelve a su "normalidad". Ya os dije con anterioridad que el otoño es mi estación favorita del año. Este tiempo "enciende" mis ideas y mi actividad, así que espero poder ser algo más productiva de lo que he sido este verano.
A la mayoría de nosotros nos gustaría tener una vida sólo de color rosa. Vivimos ahora en una sociedad de la felicidad. No podemos tolerar las emociones negativas aunque sean pasajeras. No soportamos el malestar y dolor. Queremos que todo lo que ocurra se resuelva de una forma rápida. La tristeza no vende. ¿ Quién quiere estar cerca de alguién triste? Como muestra tenemos que cuando alguién sufre una pérdida de un ser querido, al poco tiempo ya está la gente de alrededor haciendo comentarios del tipo: "no puedes seguir así,la vida tiene que ir hacia delante". Si no podemos dormir o estamos nerviosos ya iremos al médico de familia a que nos recete algo para volver a estar como antes. ¿ Pero es que ese malestar que sientes por la pérdida de tu padre se quita con una pastilla? La respuesta es no, pero la sociedad nos dice SI. Y a este hecho le acompaña ( para variar) un sustancioso negocio de las compañias farmaceúticas ( de esto ya hablaré en otro post). Hace poco lei un comentario en facebook de alguien que decia que ahora la gente se hacía los famosos selfies mostrando los felices que eran ( de lo bien que se lo pasan, con sus estupendos amigos,etc). Esta es nuestra vacuna en la actualidad. Nos protegemos de la soledad, del miedo a la muerte o a que suceda algo, del dolor, del vacío, pensando o haciendo querer ver a los demás, que somos inmunes a lo negativo. Y esto es algo contagioso..Cuanto más felicidad vemos en los demás más felicidad deseamos para nosotros mismos... Si hay algo que obstaculiza la misma tratamos de eliminarlo rápidamente. Tratemos por tanto, de mostrar las emociones negativas desde la infancia, como la otra cara de la moneda. No tratemos de evitarlas porque no desaparecerán. Cojamos de la mano nuestros recursos o los de los que tenemos cerca para pasar sobre ellas. Sólo asi, veremos el color rosa con sus "matices".
¡Qué tengáis buena semana!
![]() |
| EXTRAÑAR ES EL PRECIO QUE SE PAGA POR VIVIR MOMENTOS INOLVIDABLES |

Tienes razón Sónia. Lo que pasa es que la sociedad nos impone también una incapacidad para la frustración desde pequeños. Todo tiene que ser perfecto. Absolutamente perfecto. Tienes que ser Barbie, viviendo en un pedazo de mansión con Ken al lado y toda una panda de niños preciosos y perfectos. Si no esa sí no eres feliz y el hecho es que luego nos hace falta todo un trabajo interior para recuperarnos. Volver a ser nosotros. El ser infeliz, estar cansada, deprimida, no se lleva. De lo que la gente se olvida es que muchas veces (bueno, casi siempre) para ser un poco más feliz tienes que pasar por bajones y malos momentos. Me ha gustado mucho este post. Besotes.
ResponderEliminar